Cartel publicitario promoviendo el voto. (Foto: @abidjan911)

Cartel publicitario promoviendo el voto. (Foto: @abidjan911)

Síguenos en Facebook



Millones de afganos se preparan para las elecciones presidenciales del sábado, en lo que sería la primera transferencia democrática del poder en el país del Medio Oriente.

Sin embargo, el proceso se ha visto mermado por una ola de violencia por parte de los talibanes y otros islamistas radicales, quienes desplegaron sus fuerzas en un intento de desestabilizar al Gobierno que esperan derrocar. Decenas de personas murieron a causa de estos atentados, incluyendo la periodista de Associated Press Anja Niedringhaus.

Unos 400 mil militares y policías afganos fueron llamados al servicio para impedir ataques a los centros de votaciones, mientras que en la capital Kabul se ha implementado puntos de control y bloqueos de carreteras.

El proceso es particularmente importante para el país, que ha vivido décadas de violencia y que en 2002 fue blanco de una operación militar estadounidense para derrocar al gobierno de los talibanes, quienes daban refugio al líder de Al Qaeda Osama bin Laden.

El presidente saliente del país, Hamid Karzai, no tiene permitido presentarse para los comicios, aunque hay candidatos afines a su causa que le permitirán mantenerse cerca del poder, informó BBC News.

En total, hay ocho candidatos en la carrera por el sillón presidencial. Sin embargo, solo tres son considerados como opciones viables: los excancilleres Abdullah Abdullah y Zalmai Rassoul y el exministro de Finanzas Ashraf Ghani Ahmadzai.

ENLACE: Un policía asesina a periodista ganadora del premio Pulitzer en Afganistán

Ninguno de estos tiene posibilidades de ganar más del 50%, por lo que lo más probable es que todo pase a una segunda vuelta para el 28 de mayo.