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Las hermanas Melissa y Lizeth Contreras, dos de las cinco sobrevivientes del globo aerostático que cayó el domingo al mar de Cañete, narraron cómo fueron las nueve horas que se mantuvieron a flote antes de ser rescatadas.
Ellas contaron que Aldo Torres del Pino, el único desaparecido luego de que se hallara el cadáver del piloto Juan Carlos Férnandez, entró en pánico y no pudieron ayudarlo. Además, afirmaron que sí estaba previsto sobrevolar el mar, por lo que debieron usar chalecos salvavidas.
“En un primer momento caímos al mar, pero se activó el aire y volvimos a despegar. No tenía confianza en el piloto porque no hablaba con nosotros. Luego, él nos dijo que se había acabado el gas e íbamos a caer”, relató Melissa desde el Hospital Naval, donde se recupera de sus lesiones.
“Esta vez el impacto fue fuerte, se hundió y volvió a flote. El piloto indicó que todos los que sabían nadar debían bajarse. En el mar vimos flotando unos balones y nos agarramos. Luego vimos a las personas que no sabían nadar, el piloto les dijo que salgan de la canastilla porque él se quedaría hasta el final”, señaló.
La joven añadió que una hora después vieron el cuerpo del piloto flotando. “Aldo estaba con mi hermana en el balón, estaba en shock. No quería venir hacia el balón donde estábamos todos, lo intentó, pero no pude ayudarlo”,recordó con lágrimas.
