Petro Poroshenko se reunió con los líderes de la UE. (Foto: European Council/Flickr)
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La Unión Europea advirtió a Rusia que enfrentará nuevas sanciones económicas en “una semana” si no revierte su accionar en Ucrania.
El ultimátum ocurrió poco después de que el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, señalara que la situación en su país está cerca de llegar “al punto de no retorno: una guerra a gran escala” y afirmara que son víctimas de agresión militar y terror” por parte de Rusia.
Estas afirmaciones tuvieron lugar durante un congreso en Bruselas en el que también participaron líderes de la Unión Europea.
Moscú niega estar apoyando a los rebeldes en el este de Ucrania, quienes en los últimos días han visto un avance en su lucha contra las tropas del Gobierno. Los combates, que comenzaron en abril, ya han cobrado más de 2.600 vidas.
“Cualquier acción ofensiva tomada por Rusia sería el punto de no retorno. Es por eso que debemos tomar monumentales esfuerzos para detener eso”, dijo Poroshenko ante sus colegas.
El mandatario también señaló que las nuevas sanciones por parte de la Unión Europea sería preparadas e implementadas dependiendo del éxito de su plan de paz propuesto, informó BBC News. Añadió que el plan de paz sería publicado la próxima semana.
Poroshenko afirmó que discutirá la posibilidad de un alto al fuego en el encuentro del lunes en Bielorrusia, que contará con representantes del país anfitrión, Ucrania, Rusia y el OSCE.
La imposición de más sanciones económicas contra los funcionarios rusos es apoyada por la mayoría de los miembros de la UE, pero aún hay voces disidentes. Por ejemplo, el primer ministro finlandés, Alexander Stubb, indicó que todavía no se ha tomado una decisión sobre si las sanciones han funcionado. “Necesitamos encontrar un alto al fuego, un plan de paz”.
Ejército en retroceso
El Ejército ucraniano indicó hoy que tuvieron retroceder luego de que tanques supuestamente rusos atacaran la localidad de Novosvitlivka, cerca de Lugansk.
Tropas gubernamentales también están intentando evacuar el pueblo de Ilovaisk, en la región de Donetsk, al estar rodeados por los rebeldes.
Las fuentes oficialistas acusan a Rusia de proporcionar tropas a los rebeldes, acusación que Moscú niega.
