La 'Araña' se lesionó en el segundo round y perdió por nocaut técnico. (Captura: UFC 168)
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La revancha entre Anderson Silva y Chris Weidman por el título de los pesos medianos de la UFC terminó de una forma que pocos esperaban: la ‘Araña’ retorciéndose sobre el octágono con la pierna izquierda rota. El público enmudeció al ver una de las lesiones más graves de los últimos años en las artes marciales mixtas.
La pelea estelar del UFC 186 –el último evento del año, organizado en Las Vegas– empezó con el campeón agresivo. Weidman llevó a Silva a la reja e intentó el derribo. Anderson tomó al campeón en un clinch de muay thai, pero recibió un golpe cruzado en la oreja y cayó al piso al borde del nocaut.
Weidman lastimó al retador con algunos codos al rostro y puños, pero la ‘Araña’ se defendió correctamente con una guardia bien cerrada y golpes desde abajo. El dueño del cinturón terminó el asalto con sangre en la nariz y Silva no parecía haber sufrido castigo: su rostro lucía intacto.
Anderson empezó el segundo round manteniendo la distancia: rectos de derecha y patadas bajas a las rodillas de Weidman. El campeón se defendió de los ataques hasta el trágico minuto 1:16. Silva lanzó una low–kick con la izquierda y Chris se protegió del impacto con la rodilla.
Anderson cayó a la lona retorciéndose de dolor: su pierna estaba rota. El público quedó mudo por algunos segundos y el réferi Hearb Dean paró la pelea. Weidman había derrotado al que para muchos es el mejor peleador de todos los tiempos por segunda vez en menos de un año.
“Trabajé mucho con chicos que son buenos con las patadas bajas. Sabía que si me protegía con las rodillas, lo iba a dañar, pero lo que pasó esta noche es una locura (…) Le deseo lo mejor a Anderson y que Dios lo bendiga”, dijo Weidman después del combate. En su primer combate contra la ‘Araña’, en el UFC 162, el monarca de los medianos sufrió con las low–kick del retador pese a que ganó por nocaut.
Weidman –11 victorias y ninguna derrota– defenderá ahora su cetro ante Vitor Belfort, quien llega con una racha de tres victorias consecutivas, todas por nocaut. Pero la pregunta ahora es si Anderson Silva, el luchador más dominante de los últimos años, se retirará de la UFC luego de dos derrotas consecutivas.
