Manuel Noriega demanda a creadores de 'Call of Duty' por presentarlo como un asesino

El que fuera dictador de Panamá, Manuel Noriega, ha demandado a la distribuidora de videojuegos Activision por retratarle como un asesino, secuestrador y traidor en la entrega de la saga del videojuego Call of Duty: Black Ops II, publicado en 2012.

Manuel Noriega ha demandado a Activision por haber incluido en el videojuego Call of Duty a un personaje que, con su mismo nombre y un gran parecido físico, representa el papel de villano y homicida. El propio Manuel Noriega es presentado en el videojuego como presidente de Panamá durante un episodio ambientado en la década de los 80 en el país centroamericano, tiene buenas relaciones con la CIA y se hace amigo del protagonista del juego.

Sin embargo, para su desgracia, se acaba convirtiendo en “un traidor a la patria, un asesino y un secuestrador”, según afirmó el auténtico Noriega en Los Ángeles, EEUU, tras presentar una demanda ante la Corte Superior.

En el videojuego, del cual se han vendido más de 24 millones de copias en todo el mundo, Noriega reniega de la CIA, traiciona a los principales protagonistas y mata indiscriminadamente a miembros de sus propias fuerzas policiales y militares panameñas. Además, dentro del propio juego, es descrito como un “pedazo de basura”, un “bastardo” y “vieja cara de piña”.

El expresidente lamenta que Call of Duty haya ganado mucho dinero a costa de las similitudes de sus historias con acontecimientos y personas reales, acusando a Black Ops II de utilizar a su persona sin su autorización o consentimiento para el personaje del videojuego debido a la gran semejanza que ambos guardan, tanto física como contextualmente hablando.

En su demanda, publicada por el Courthouse News Service, Noriega denuncia que “su imagen se haya visto afectada ante tal similitud, ya que es mostrado como el antagonista y culpable de numerosos crímenes atroces”, creando la falsa impresión de que Activision está autorizado a usar su imagen.

Manuel Noriega fue encarcelado en 1992 en EEUU y condenado a 30 años de cárcel por estar relacionado con redes de narcotráfico. En 2010 fue extraditado y juzgado en Francia, donde se le condenó a siete años de prisión por blanquear dinero del narco. En diciembre de 2011 fue repatriado a Panamá, donde ha estado viviendo bajo arresto domiciliario. A pesar de que tiene ya 80 años de edad, aún sigue a la espera de ser juzgado por crímenes de homicidio.

Fuente: RT en español